El calendario marca fechas que son mucho más que simples efemérides; son hitos que nos invitan a mirar hacia atrás para entender cuánto hemos caminado y, sobre todo, hacia dónde vamos. Este 7 de diciembre, celebramos un nuevo aniversario de nuestra bodega, una fecha que simboliza la materialización de un sueño que comenzó con audacia y que hoy se erige como un referente indiscutido del vino argentino en el mundo.
No celebramos solo el paso del tiempo. Celebramos la consistencia de una visión. La historia de nuestra bodega es la historia de una mujer que decidió desafiar los límites de lo posible, transformando la industria vitivinícola nacional para siempre. Es, también, la historia de una familia que supo tomar ese legado y transformarlo en un presente de vanguardia y sostenibilidad.
En este artículo, te invitamos a recorrer los momentos clave de nuestra trayectoria, a entender nuestra filosofía de innovación enológica y a descubrir por qué, después de tantos años, seguimos creando con la misma pasión del primer día.
La visión de una pionera: el origen de todo
Para comprender el presente de los vinos de Susana Balbo, es necesario volver al origen. Susana no solo fundó una bodega; fundó una manera de hacer y de sentir el vino. Graduada en 1981 con honores, se convirtió en la pionera del vino en Argentina al ser la primera mujer en obtener el título de enóloga en el país.
Su camino no comenzó en la comodidad, sino en el desafío. En Cafayate, Salta, transformó la variedad Torrontés, que hasta entonces era considerada un vino de mesa rústico, en un blanco elegante y sofisticado de clase mundial. Aquel fue el primer indicio de lo que se convertiría en su sello personal: la capacidad de ver potencial donde otros no lo veían y la técnica para convertir esa visión en realidad.
Después de décadas asesorando a grandes proyectos nacionales e internacionales, en 1999 Susana decidió que era momento de echar raíces propias. Así nació Bodega Susana Balbo en el corazón de Mendoza, con un objetivo claro: elaborar vinos de alta calidad que expresaran el carácter único de nuestro terroir con un estilo propio e inconfundible.
Innovación enológica: el arte de desafiar los límites
Si hay una palabra que define nuestro ADN, es la innovación. Pero no la innovación como una moda pasajera, sino como una herramienta para alcanzar la excelencia. Desde el diseño de los viñedos hasta los procesos en la sala de barricas, la búsqueda de la perfección es constante.
La innovación enológica en nuestra bodega se traduce en el uso de tecnología de punta combinada con un profundo respeto por los procesos artesanales. Fuimos de los primeros en experimentar con huevos de concreto para la fermentación, en investigar a fondo los perfiles de suelo de Gualtallary y Agrelo, y en apostar por estilos de vinos más frescos, vibrantes y con menor intervención, mucho antes de que se convirtiera en tendencia.
Nuestros vinos de autor no buscan simplemente agradar; buscan contar una historia y despertar una emoción. Ya sea a través de la fermentación en barricas de roble para nuestros blancos de alta gama o mediante la microvinificación de parcelas específicas para nuestros tintos ícono, cada decisión técnica tiene un propósito artístico: revelar la identidad más pura de la uva.
De proyecto personal a bodega familiar
Lo que comenzó como el sueño de una mujer excepcional, hoy es el proyecto de una familia comprometida. La incorporación de José Lovaglio y Ana Lovaglio, hijos de Susana, marcó una evolución fundamental en la identidad de la bodega.
Convertirnos en una bodega familiar no solo aseguró la continuidad del legado, sino que inyectó nueva energía y perspectivas frescas. José, como enólogo, aporta una visión contemporánea y una sensibilidad especial por el terroir, mientras que Ana impulsa la creatividad en el marketing y la hospitalidad.
Juntos, han logrado que la bodega mantenga su esencia clásica y elegante, pero con una mirada moderna y dinámica. Este equilibrio entre la experiencia de Susana y la innovación de la nueva generación es lo que nos permite seguir siendo relevantes y líderes en un mercado global cada vez más exigente. Los lazos familiares se extienden también a nuestro equipo y a nuestra comunidad, creando un entorno donde el trabajo se realiza con calidez y respeto mutuo.
Compromiso con el futuro: vinos sustentables y conscientes
Celebrar un aniversario es también pensar en los próximos cien años. Por eso, la sostenibilidad no es un capítulo aparte en nuestra historia, sino el eje que atraviesa todo lo que hacemos. Entendemos que para seguir elaborando grandes vinos, debemos ser guardianes de nuestro entorno.
Nuestros vinos sustentables nacen de prácticas agrícolas responsables, el uso eficiente del agua, la gestión de residuos y el uso de energías limpias. Certificaciones como la de Sustentabilidad de Bodegas de Argentina validan este camino.
Pero la sostenibilidad para nosotros también es social. A través de programas de impacto comunitario y el bienestar de nuestro equipo, buscamos que el éxito de la bodega se traduzca en desarrollo para todos. Creemos firmemente que el vino del futuro debe ser ético, transparente y respetuoso con la tierra que le da vida.
Nuestras líneas: la expresión de una filosofía
A lo largo de los años, hemos construido un portafolio que refleja las distintas facetas de nuestra identidad. Cada línea tiene su propia voz, pero todas comparten el sello de calidad de Susana Balbo.
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Crios: Nacida del amor de una madre por sus hijos, esta línea representa la juventud, la frescura y la invitación a mirar el vino de una manera descomplicada pero cualitativa. Son vinos que celebran los vínculos y la alegría de compartir.
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Susana Balbo Signature: Aquí es donde la enóloga pone su firma. Son vinos de audacia, que combinan la mejor técnica con una expresión artística. Es la definición de la sofisticación y el equilibrio, vinos pensados para quienes buscan una experiencia superior.
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BenMarco: Bajo la visión del viticultor Edgardo Del Pópolo, esta línea es un tributo a los terroirs de Mendoza. Aquí la intervención es mínima para dejar que el suelo hable. Son vinos de viticultor, puros y directos.
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Nosotros: Representa el esfuerzo que cada uno de nosotros hace para crear un malbec ultra-premium de colección. Partidas limitadas proveniente de un terruño diferente cada año, en función de dónde nuestro equipo encuentra la fruta más intensa y expresiva de la vendimia.
Además, nuestra propuesta se completa con Osadía de Crear, nuestro restaurante, donde la gastronomía y el vino se unen para ofrecer una experiencia turística inolvidable, galardonada internacionalmente.
Un brindis por lo que vendrá
Este 7 de diciembre, al mirar hacia atrás, vemos mucho más que botellas y premios. Vemos el esfuerzo de cientos de personas, la confianza de nuestros consumidores y la pasión intacta por crear algo trascendente.
Ser una bodega familiar liderada por la primer mujer enóloga de Argentina es un honor y una responsabilidad. Nos comprometemos a seguir explorando, a seguir cuidando nuestros viñedos y a seguir ofreciendo vinos de alta calidad que te acompañen en tus momentos más importantes.
La historia de Susana Balbo se sigue escribiendo en cada vendimia, y queremos que vos seas parte de ella.
Sumate a nuestra celebración
Queremos festejar este aniversario con quienes hacen posible nuestro camino: ustedes. Te invitamos a descubrir beneficios exclusivos pensados para nuestra comunidad en este día tan especial.
Felicitaciones y Felicidades!!!!! A una bodega de excelencia con vinos igualmente excelentes, que reflejan la filosofía no sólo de producción sino también de vida!!! SALUD!! Brindo por todos ustedes.
Bárbara